Entre los sitios que he visitado éste verano se encuentra un pueblo de Málaga que se llama Frigiliana. Es un pueblo típico andaluz con unas casitas blancas preciosas y callejuelas muy típicas.
Se encuentra en lo alto de un montículo. Está lleno de historias y leyendas, la mayoría referidas a la época de luchas entre moros y cristianos. Y hasta no hace demasiados años sus únicas forma de acceso eran a pie, en burro o en caballo.
Cuando estuve allí me prometí a mí mismo que mi primer dibujo al volver sería de alguna de sus calles, y aquí os presento dicho dibujo:
Lápices de grafito en papel de 29.5 x 21 cm con ligeros
toques de acuarela seca. Precio: 25 €